Azitromicina está indicado para las siguientes infecciones causadas por microorganismos sensibles a la azitromicina (ver secciones 4.4 y 5.1):
Sinusitis bacteriana aguda (diagnosticada adecuadamente)
Otitis media aguda bacteriana (diagnosticada adecuadamente)
Faringitis, amigdalitis
Exacerbación aguda de bronquitis crónica (diagnosticada adecuadamente)
Neumonía adquirida de la comunidad de leve a moderadamente grave.
Infecciones de la piel y tejidos blandos de gravedad leve a moderada, por ejemplo foliculitis, celulitis, erisipelas.
Uretritis y cervicitis no complicadas producidas por Chlamydia trachomatis.
Deben tenerse en cuenta las recomendaciones oficiales sobre el uso adecuado de agentes antibacterianos